31/08/2022

¿Qué es y por qué elegiste Obstetricia? Les preguntamos a las residentes de nuestro Hospital

Nos acercamos a la Residencia de Obstetricia Comunitaria, a hacer algunas preguntas con la intención de conocer cuál es el rol de esta profesión, en qué consiste la labor de las obstétricas y por qué alguien decide dedicarse a ello.
 

 

 
¿Qué es y por qué elegiste Obstetricia? Les preguntamos a las residentes de nuestro Hospital

Las fechas marcadas en el calendario tienen el objetivo de llamarnos la atención sobre algo puntual durante, al menos, ese día. El 31 de agosto es el Día de la Obstetricia y la Embarazada y por eso, este año desde el Área de Comunicación del Hospital, nos acercamos a la Residencia de Obstetricia Comunitaria, a hacer algunas preguntas con la intención de conocer cuál es el rol de esta profesión, en qué consiste la labor de las obstétricas y por qué alguien decide dedicarse a ello.

 

En la sede de la Residencia se encontraban las licenciadas Lorena Fusse (instructora), Camila Dappen, Marianela Cortez, Ailin Soto y Melissa Martinez.


¿Por qué eligieron esta carrera?

 

Camila: desde chica, siempre lo supe. Nunca me imaginé siendo otra cosa. Me generaba mucha curiosidad el tema de la fecundación y la embriología. Me resultaba imposible creer que un ser humano pudiera crecer dentro de otro. Y los partos, sobre todo. Me pasaba viendo videos. La carrera la re disfruté porque justamente resolví toda esa intriga, esa curiosidad.

 

Lorena: Hoy no me veo no siendo obstétrica. Creo que es una carrera que demanda mucho, que el estar con la otra persona en las situaciones que son diversas en relación a los nacimientos demanda mucha energía, mucho tiempo.

Todo el trabajo que una puede hacer en el Centro de Salud me encanta,  pero, los nacimientos, la guardia, a mi me apasionan con toda su adrenalina e intensidad. Y me parece que es de valorar lo que una puede llegar a dar, en ese momento a esa mujer, a esa familia, a ese bebé, en el nacimiento.

 

Marianela: cuando estaba averiguando la oferta en la facultad a la que iba a estudiar, aunque tenía planificado anotarme en derecho, me dió curiosidad lo que había en Salud, y vi obstetricia, entonces unas chicas me dijeron, “es hermosa la carrera que vas a estudiar”. Me anoté, y fue apasionante. Nunca sentí que me costara estudiar, me sentaba y podía pasar horas y horas leyendo libros que me re interesaban y quería más. Así fue que terminé, pero quería seguir formándome. Si bien, yo me recibí y al mes empecé a trabajar en una clínica privada, en las clínicas privadas generalmente el que asiste el parto es el médico, entonces yo sentía que quería más quería más y decidí entrar a una residencia y justo pasó que en ese mes habían quedado dos puestos vacantes para entrar a esta residencia. Decidí venir (desde Mendoza), me presenté, rendí y entré.

"Muchas veces cuando una está estudiando, se imagina muchas cosas. Y la realidad es que terminás de enamorar de la profesión en la práctica, porque ves que no todo es tal cual como en los libros, y el acompañamiento no te lo enseña nadie, el cómo acompañar, el estar, el tiempo, eso no te lo enseña nadie. Eso lo vas viviendo en cada acompañamiento, en cada día.

A mi me terminó de enamorar la profesión en la práctica, porque el acompañar te moviliza como profesional y como persona. Además cómo uno esté , también va a influir en esa familia"

 

Es muy hermoso conocer a la paciente desde un principio, a veces desde que está buscando ese embarazo, acompañarla en todo ese proceso en el centro de salud , y después en el de nacimiento. Creo que es lo más satisfactorio que hay. Esta residencia te da la posibilidad, porque al ser comunitaria, las residentes, estamos repartidas en muchos centros de salud y también cubrimos varias guardias del HMISR. Entonces está la chance de que nuestras pacientes, al momento del parto “caigan” en nuestras guardias, y acompañarla también en ese momento.

 

Aunque en el ámbito público es más difícil, es posible generar un vínculo de confianza en el que las mujeres se sientan contenidas. Con empatía, con cariño y con dedicación lo puede hacer.

 

¿Cómo es el vínculo con las pacientes?

Lorena: Las obstétricas tenemos mucha llegada a las mujeres, generamos una relación distinta a que se da con otros profesionales. ¿En base a qué la construimos o cómo se empieza a construir? Creo que con la empatía, traducida en el dedicar esos "5 minutosmás".

Puntualmente esta Residencia de Obstetricia brinda la posibilidad de conocer varios centros de salud, de asistir a esos lugares y de estar a la vez en el Hospital, de modo que  somos un nexo. Entonces, las residentes terminan generando un ámbito de mucha confianza e intimidad  porque te ven en el Centro de Salud, hacen por ahí el curso acá de preparación para el nacimiento en el Hospital y vienen, tienen su bebé y quizás por ahí, justo coincide que la misma que estuvo o por lo menos cae con alguien del grupo de obstétricas.

 

¿Qué tiene que tener alguien que quiera ser obstetra?

Camila: Paciencia, empatía, mucha predisposición, , respeto por la mujer, la familia, sus derechos, ganas de cambiar la manera de nacer y de hacer otro tipo de atención, más integral.

 

Ailin: Es un momento muy sagrado que vive esa familia y creo que uno de los más trascendentales, genera un recuerdo. El acompañamiento tiene que ser de parte alguien con una calidad humana que esté al nivel de las circunstancias, con la amorosidad, el respeto, la calidez, la empatía.

 

Y...¿cómo es el día a día de la Residencia de Obstetricia? ¿De qué se trata?>>>

 

Camila: Nuestra Residencia tiene un eje en la atención primaria. Tenemos presencia en 10  centros de salud, incluido uno en la ciudad de Viale, por eso salimos mucho a los barrios. Pero también nos encargamos del curso preparto, el online y el presencial, y hacemos guardias en el HMISR.

Nos dedicamos mucho a la prevención y a la promoción de la salud. Tratamos siempre de generar actividades en relación al cáncer de cuello de útero y de mama, de promover la lactancia materna, el parto respetado.

 

Marianela: También vamos a las escuelas de las áreas programáticas de los Centros de Salud para hacer actividades, talleres.

 

¿Qué incidencia consideran que tienen para la instalación efectiva del parto respetado?¿qué rol tienen cómo agentes de esa transformación?

 

Marianela: El parto respetado no es "no intervenir", es respetar los deseos de la mujer. Es intervenir cuando es necesario respetando los deseos de la mujer, dándole todas las posibilidades y los conocimientos sobre los riesgos y beneficios. Eso es lo que tratamos de hacer siempre, dar todas las posibilidades y que la mujer elija.

 

Camila: Somos responsables de que eso pase, pero se necesita acompañamiento, desde lo más tonto, como apagar la radio con el partido del domingo en el momento del parto. Cosas así, que hacen al respeto de ese momento sagrado. También está instalado en la sociedad que todas las intervenciones son medidas de cuidado, y no siempre es así. A veces puede tratarse de comodidad profesional, que es algo que habría que desterrar.

Lo primordial es seguir el deseo y las decisiones de la paciente, que ella y la familia sean las protagonistas, y no uno por tener el conocimiento para asistir.

 

Ailin: Somos muy responsables en enseñarles a las familias y en intentar que todo lo que quieran para su nacimiento se cumpla. Hay cosas que exceden, más que nada a nivel edilicio. Después, con lo que se tiene, se puede dar igual el parto respetado: desde el silencio, dar el tiempo que el bebé necesita estar en el pecho y no que se lo lleven en seguida, no estar revisando a cada rato, esperar que el bebé haga su descenso solito por la pelvis, que cada paso que haga importe para su nacimiento también.

 

Lorena: Se hacen cosas que son tan simples y que en ese momento valen mucho, más que nada para esa familia

 

Marianela: Lo de la revisión es un buen ejemplo, porque por ahí, al contrario, también hay mujeres que te piden "revisame, para saber cómo voy". Quizás les decís "avanzaste un cm más", y es el momento más feliz de su vida porque siente que está progresando, y eso también está bien. Creo que nuestra profesión nos hace muy afortunadas al poder ser parte de ese momento, ver todas las emociones de los que están ahí presentes, de los protagonistas, que son esa familia. El poder ver eso, es único. Y nosotras lo podemos apreciar en silencio, y hasta llegar a emocionarnos nosotras mismas, es muy hermoso.

 

Camila: De todas formas, no siempre pasa que los escenarios son los ideales. Hay partos en los que hay bebés que no son bien recibidos o en los que cuesta la adaptación y eso también es fuerte.

Cuidando los tiempos fisiológicos naturales de cada proceso, con sus horas y ese lado b de ser tan demandante, y con el cansancio, la falta de sueño y lidiar con el dolor, que no es fácil. Aún así, tratar de conectar con ese momento super mamífero que tenemos, genera los mejores resultados.

 

Lorena: Nosotras somos las encargadas de esta transmisión de conocimiento, porque también, a lo largo del tiempo, la historia de los nacimientos ha ido cambiando, y hoy se está volviendo al respeto de los tiempos biológicos.

 

Ailin: Nos reeducamos respecto a lo que nos enseñaron porque y reaprendemos un montón de cosas. Porque también vas sugiriéndole a las mujeres que quieren y ves que el resultado es fantástico.

 

Lorena: Dentro de lo que nosotras tenemos (atendiendo a las condiciones edilicias, por ejemplo) tratamos de mantenernos en la privacidad, en el silencio, respetando algunos tiempos y cuando pasamos a la sala de parto donde es´ta el quirófano y hay mucha más gente, muchos ruidos, es más dificil y empieza a haber pequeñas cosas que en ese momento íntimo interfieren, y sucede. Forma parte de lo normal. En otra época la radio, que sigue estando en el quirófano, la ponían y te encontrabas con cualquier tipo de música en un nacimiento. Para nosotras era normal entrar a un parto y que esté cualquier música. Hoy, pasamos y sh! apagamos la radio o hacemos señas de silencio. Son todos cambios que se pudieron hacer, y se pueden pero es importante que acompañe todo el resto. Por ejemplo, una de las dificultades es lidiar con la impaciencia.

 

Melissa: Creo que ese cambio es general e histórico. Hace unos años se trabajaba activamente y todos teníamos que trabajar así. No podías estar 12 hs con una paciente. No había lugar para esa idea.

 

Lorena: Lo que uno transmite en ese momento es muy importante, porque a una mujer en el momento de su nacimiento o de su puerperio, con una sola palabra que le digas, o la subís o la bajás, la condicionás muchísimo. Entonces, ese cuidado de la palabra y la demostración es muy importante también.

Es importante remarcar que no es lo mismo nacimiento sin intervención que el nacimiento respetado.

 ¿Dónde está todo? En conocer a la mujer a la que se atiende.

En la asistencia hospitalaria de la guardia, la gran mayoría de las mujeres que atendemos son desconocidas para nosotras y en ese momento tenemos el desafío de que generar cierto vínculo y ver qué es lo que necesita.

 


Más info sobre la Residencia de Obstetricia Comunitaria:

https://www.hospitalsanroque.gob.ar/seccion/articulos/104/residencia-de-obstetricia-comunitaria